¿Alguna vez se ha preguntado cuántos años tiene el suelo que está bajo sus pies? Es una cuestión muy común que interesa tanto a compradores y propietarios como a inversores y aseguradoras.
A continuación, le desvelamos dos de los métodos más utilizados para conocer la fecha de edificación de una propiedad.
Conocer la fecha de construcción de un inmueble
- Certificado de licencia de obras
Un documento que permite conocer el año en que se otorgó la licencia para llevar a cabo la edificación.
Es habitual no disponer de este informe, pero en la mayoría de los municipios existe un archivo histórico al que cualquier ciudadano puede acudir para consultar las fechas de concesión del permiso de obras.
En caso de no localizarse el certificado, probablemente existan copias de los proyectos básicos y de ejecución realizados por los profesionales encargados del diseño de la propiedad.
Eso sí, estas fechas podrían servir como una guía aproximada sobre los años exactos. Haría falta considerar la realización del proyecto y la ejecución de las obras, cuya duración suele variar entre uno y tres años.
- Información del catastro
La forma más rápida de descubrir el año de construcción de una vivienda.
Un registro administrativo dependiente del Ministerio de Hacienda y Función Pública que describe las características de los inmuebles rústicos y urbanos.
Proporciona los siguientes datos:
- Ubicación de la finca.
- Referencia catastral.
- Superficie de uso.
- Superficie construida.
- Representación gráfica.
- Valor y titular catastral.
- Año de construcción.
¿Qué pasos hay que seguir para hallar el momento de edificación de una propiedad en el catastro?
- Acceder al sitio web de la Sede del Catastro (www.sedecatastro.gob.es).
- Identificar la vivienda de la que se desea obtener información mediante la referencia catastral o dirección.
- Seleccionar la opción Datos.
La importancia de conocer la fecha de construcción de un inmueble
Averiguar la fecha del levantamiento de una vivienda es relevante por diversos factores que pueden repercutir en la toma de decisiones.
- Ayuda a comprender su arquitectura, estilo y materiales utilizados para valorar su importancia histórica y patrimonial.
- Permite conocer su valor actual dependiendo de las características específicas, mantenimiento y renovaciones realizadas a lo largo de los años.
- Proporciona información sobre su estado general.
- Facilita la comprensión de las leyes y regulaciones aplicables.
- Posibilita a las compañías aseguradoras a evaluar el riesgo y establecer las primas en caso de solicitarse un seguro para la propiedad.
