Le desvelamos las ventajas e inconvenientes de cada mes para vender su propiedad.
¿Está pensando en colgar el cartel de en venta a su propiedad? ¡Conocer la época más indicada para hacerlo puede convertirse en la herramienta perfecta para una venta 100% exitosa!
Y es que, antes de iniciar el procedimiento, es fundamental conocer en qué momento se encuentra el mercado inmobiliario. De este modo, podrá conseguir una venta mucho más rápida y rentable.
A continuación, le detallamos algunas ventajas e inconvenientes de vender una propiedad en función del mes del año en el que nos encontremos. No se pierda ningún detalle.
Ventajas e inconvenientes de cada mes para vender su propiedad
Diciembre, enero y febrero
Estos meses pueden convertirse en una gran oportunidad si juega bien sus cartas.
Aunque pueda parecer lo contrario, el clima frío favorece a la venta de una propiedad. En esta época del año, se encuentran menos viviendas disponibles y esto se traduce en un descenso de la oferta. Por lo que los potenciales compradores podrán poner mucha más atención en su vivienda.
Además, quienes buscan un inmueble en invierno a menudo suelen ser perfiles más serios que los compradores ocasionales o aquellos que buscan una vivienda en verano.
Eso sí, deberá tener en cuenta que durante estos meses puede haber menos número de compradores por el hecho de coincidir con las vacaciones navideñas.
Marzo, abril y mayo
La llegada del clima más cálido y soleado convierten la primavera en una época popular para la compra de viviendas, incrementándose el número de interesados.
Este incremento de la demanda puede llegar a afectar al alza los precios de venta. Algo positivo para los vendedores, pero con lo que hay que tener cuidado, ya que podría llegar a alejar a algunos compradores.
Junio, julio y agosto
Durante los meses de verano, aquellos que se encuentran en plena búsqueda de su nuevo hogar tienen más tiempo libre, algo que les permite visitar las viviendas con tranquilidad.
Aprovechar los espacios exteriores, como los jardines, para agregar valor a su propiedad durante esta época es un factor que puede llegar a determinar la decisión final. ¡Y es que los compradores se imaginan automáticamente la calidad de vida que les daría un espacio al aire libre!
Como inconveniente y al igual que sucede en los meses anteriores, existe una mayor competencia en el mercado que puede producir un aumento de los precios de venta; alejando así a algunos compradores.
Septiembre, octubre y noviembre
Debido a las suaves temperaturas y a la motivación de aquellos compradores que no pudieron adquirir una vivienda en primavera ni en verano, vender en otoño puede ser una buena oportunidad.
Al ser una época menos popular para la venta, suele haber menos competencia entre los vendedores.
Ahora bien, durante estos meses podemos encontrar una menor cantidad de interesados, un hecho que podría derivar en un mayor tiempo de venta.